IA con «agencia física»
En mayo de 2024, un avance revolucionario inspiró a Tetsuwan Scientific. Después de observar cómo modelos avanzados de OpenAI podían interpretar datos científicos complejos, como un gel de ADN, Ponce y Schäfer tuvieron una revelación: estos modelos no solo podían diagnosticar problemas, sino también sugerir soluciones científicas precisas.
“Era el eslabón perdido que necesitábamos: combinar la capacidad analítica de la IA con robots capaces de ejecutar esas soluciones automáticamente”, comentó Ponce.
Robots que entienden el contexto
Los robots de Tetsuwan Scientific no se parecen a humanoides; son estructuras cuadradas de cristal diseñadas para tareas específicas. Sin embargo, su verdadero poder reside en el software y sensores que les permiten comprender las propiedades físicas de los líquidos, realizar ajustes autónomos y optimizar experimentos sin intervención humana.
Aplicaciones y Logros Iniciales
Aliados en la investigación biomédica
Actualmente, Tetsuwan Scientific colabora con La Jolla Labs, una empresa de biotecnología que desarrolla terapias basadas en ARN. Los robots de Tetsuwan ayudan a medir la eficiencia de las dosis y a realizar tareas que antes requerían horas de trabajo manual.
Respaldo financiero
La startup ya ha recaudado 2,7 millones de dólares en una ronda pre-semilla liderada por 2048 Ventures, con el apoyo de inversores destacados en biotecnología como Carbon Silicon Ventures y Everywhere Ventures.
Un Futuro de Ciencia Autónoma
Hacia un método científico automatizado
El objetivo final de Tetsuwan Scientific es ambicioso: robots que puedan automatizar todo el método científico, desde la formulación de hipótesis hasta la obtención de resultados repetibles.
“Estamos hablando de una tecnología que podría acelerar exponencialmente el progreso humano”, afirma Ponce. “Es lo más emocionante en lo que podríamos trabajar.”
Un movimiento global
Tetsuwan no está solo en esta misión. Organizaciones como FutureHouse y Potato AI también están explorando cómo la IA puede transformar la ciencia, acercándonos a un futuro donde las máquinas sean compañeras de investigación autónomas.
Conclusión: Ciencia al Ritmo del Futuro
Tetsuwan Scientific está revolucionando la investigación científica al combinar robots accesibles con el poder de la IA avanzada. Su trabajo no solo está aliviando la carga de tareas tediosas, sino también abriendo un mundo de posibilidades para acelerar descubrimientos en biotecnología, medicina y más.
La visión de Ponce y Schäfer promete un futuro en el que la ciencia no tenga límites, donde los robots y la IA trabajen en armonía para desatar el verdadero potencial de la humanidad.